El senador territorial de Compromís, Carles Mulet, ha visitado junto al concejal de Orpesa, Josep Lluís Romero, los pasos subterráneos para peatones a las líneas ferroviarias de esta localidad, para comprobar en primera persona el mal estado de conservación de los mismos.
El municipio cuenta con dos pasos subterráneos, un junto a la Estación de ferrocarriles, y otro cerca de un conocido supermercado, los cuales se encuentran en un deplorable estado de conservación por falta de mantenimiento y atención por parte de ADIF; suciedad, oxidación de las estructuras metálicas, suciedad de las paredes, marquesinas en mal estado, vallas en mal estado, malos olores, mal funcionamiento periódico de los ascensores, es el día a día de los usuarios de estos pasos “ Orpesa todavía cuenta con la vía ferroviaria atravesando el núcleo y partiéndolo en dos, y los pasos a nivel son la única manera que se tiene en un buen trozo del casco urbano para atravesar de una parte a la otra; la administración central no se hace cargo desde hace años de tener cura y mantenimiento de estos pasos que le corresponde tener en condiciones” ha manifestado el regidor Josep Lluís Romero.
Mulet ha anunciado que se va a presentar una batería de preguntas escritas desde el Senado al Gobierno Central porque explico los motivos de este abandono, y en el cual se pedirá una inversión para adecuar y arreglar los desperfectos y después un mantenimiento periódico suficiente “estamos hablando que la primera imagen que se lleva cualquier persona que llegue a Orpesa en tren, es el de una estación de la cual tiene que salir por unos pasos subterráneos que dan asco; esto, en uno de los motores turísticos de nuestras comarcas”.
El parlamentario de Compromís ha lamentado que tenga que ser la oposición en Orpesa y en las Cortes Generales quien tenga que denunciar este abandono porque ni el equipo de gobierno ni la administración central hayan movido un dedo. Compromís ha reiterado que Orpesa necesita entrar dentro de una red de cercanías en condiciones, que la línea de ferrocarril tendría que dejar de ser un barrera entre la gente que vive al casco antiguo y la costa; buscando una alternativa razonable, pero mientras, al menos que los pasos subterráneos estén en condiciones, puesto que se trata para ADIF y RENFE de actuaciones a muy pequeña escalera, asumibles, urgentes e imprescindibles”